Me detengo a ver, esa luz en el espejo, ese escapulario de recuerdos encajonados como un dulce juego, un dulce y macabro juego que parece...

Esas calles, pisos de cemento y ladrillo a sus costados, cimiento de la franja inquebrantable de fraternidad, como el hilo...

El manto nocturnal se extiende sobre el orbe. No puede detenerle. Es una misión del alma, o una línea del hilo azul del destino tejida...

Esa luna, la misma que en su mágico plenilunio me sedujo. Me llama, me arrastra, a la cepa misma de sus entrañas. Golpea silenciosa, muy...

Hay silencio… Es el silencio aterrador de los cuerpos inertes. Triste imploración de sus almas rotas y su espíritu hecho pedazos. Es la...

Oye esa voz que en el abismo clama y en loza fría se agita Que tormentosa entre llantos y epopeyas Llora, gime y llama Que mustia y...

La memoria guarda recuerdos tristes y amargos. Pero nunca, como los que hoy minuto a minuto quedan con este río de sangre, dolor y ...

Oscilando entre su realidad y el pasado, jugaba a diario con sus recuerdos. Cada tanto, fijaba la mirada en el cuadro desvencijado...

La soledad también se junta con el bullicio de la noche silenciosa. Es esa espina que taladra, que lastima. La soledad es terapia, es...

Detuvo su vuelo y caminó lento, muy lento, sobre la periferia del orbe. Asemejando a un ave gigantesca que extiende sus alas en el...

Deja que la claridad Vuele como los ángeles Deja que entre sus vuelos Arrastre lágrimas Hilo imperceptible de la pupila Y cual manto...

El aire vuela sacudiendo sueños Haciendo ruidos Levantando aleros Y en la tumba, su propia tumba Exhala su último aliento Cuando las...

Luego de haber saboreado un tiempo indefinible, las horas y minutos se hacen eternos. Las calles vacías asemejan una ciudad fantasma y el...

La muerte solemne y soberbia, un día tocó a mi ventana. ¡Detente! Le dije. Y entonces, la luz tomó la opacidad del aire, la garganta se...

Se abren las pupilas a la brisa de la noche, a la luz de la aurora boreal, a la furia del cenit. Busco dentro de mí, y la luz de...

Con la mirada en la profundidad del alma, en el epicentro del corazón, subí por las mágicas arandelas del hilo imperceptible que los...

Esta noche me he sentido incompleta. He degustado en la vid del corazón, la pócima de la sed, y en lo recóndito del alma, el vacío que...

Cuando para hallarte tiendo los brazos La furia del corazón Y el lamento del alma Y a lo lejos... En la penumbra de la noche te diviso,...

Hubo un tiempo, que el aire faltaba a los pulmones La vida en las venas no fluía Y la vid… la vid de los labios decaía El cabello...

La noche, panacea de ansias locas, poéticas y delirantes, lo es, igual, de los más recónditos misterios, y a la vez, caldo de cultivo...